Curioso nombre el de "Hermanos", ¿no? Sí es un nombre... nah, es coña, pero seguro que os lo habíais creído eh, a mí no me engañáis. Probablemente muchos conoceréis a este par de genios, seguramente más de lo que habéis conocido a la mayoría de locos que han pasado por aquí. Pero aunque ahora sean más famosos y estén dentro de los círculos de Hollywood, se diferencian lo suficiente (y son suficientemente desconocidos para la gente que no es cinéfila, algo triste debo decir) como para dedicarles una edición de "Al otro lado de la cama". Sus nombres son Joel y Ethan Coen y ojalá tuviera el brío que tienen ellos. Malditos y sensuales hermanos Coen.
En el caso de estos señores, no describiré su filmografía película por película, básicamente porque tienen demasiadas y aquí tampoco estamos para pasarnos cuatro años. He visto toda su filmografía con una sola excepción, "El gran salto", una comedia que para muchos es la peor de las que han hecho los Coen. Un total de 15 películas, que no es poco, yo creo que estoy capacitado para hablar de ellos. Dentro de esas 15 películas, no hay ni una sola que se pueda considerar mala. Sin embargo, a destacar algunas, personalmente destacaría "No es país para viejos", "El gran Lebowski", "Fargo", "Barton Fink" y "Muerte entre las flores". Si ya habéis visto películas suyas, sabéis de que palo van. Algunos les comparan con Tarantino (por la mezcla de humor negro y violencia, supongo), aunque la verdad es que nada más lejos de la realidad. Los Coen tienen un arte diferente, sus historias son más irónicas, más críticas, más crueles incluso. Su ópera prima fue "Sangre fácil", estrenada en 1984, una buena película, oscura e intrigante, sin ir más allá. Poco a poco se fueron consolidando y fueron creando sus obras maestras, generalmente con un mismo tipo de tono. Un tono absolutamente único y que todos agradecemos.
¿Qué es ese tono? Me temo que no se puede describir con palabras muy bien. Es una mezcla de tramas enrevesadas, humor negro y surrealista y personajes envidiablemente imbéciles (no todos, claro). Sin embargo no todas sus películas son tan ligeras ni todas son de este tipo. Si se puede decir algo de los Coen, es que se atreven con lo que sea, han hecho desde thrillers ("Fargo", "No es país para viejos"), comedias dramáticas ("Barton Fink", "A propósito de Llewyn Davis"), cine negro ("Muerte entre las flores", "El hombre que nunca estuvo allí"), comedias ("El gran Lebowski", "Ladykillers") y hasta westerns ("Valor de ley") y comedias románticas ("Crueldad intolerable"). Me he pasado un poco con los paréntesis igual, bueno, lo que decía, que son verdaderos Leonardos Da Vincis. Si tuviera que elegir su trabajo más personal, diría sin dudar que esa es su última película, la irónica y reflexiva odisea dickensiana "A propósito de Llewin Davis", una melancólica comedia sobre un músico intentándose ganar la vida. Por otro lado, su película más seria sea probablemente "No es país para viejos". Y joder, que peliculón.
Si hay algo que podemos agradecer a los Coen, es su gran variedad de personajes pintorescos, probablemente su mejor sello, daría nombres, pero es que hay como diez personajes memorables por película, aunque si tuviera que quedarme con un personaje, probablemente me quedaría con John Turturro haciendo de bujarrón latino, también conocido como Jesus, de "El gran lebowski". Espero que su carrera siga igual de surrealista y que no terminen cayendo ante el imperio comercial de Hollywood.