Crítica doble a Bajo la misma estrella: Una historia de amor, cáncer y hip hop sueco




A - No sé… Hay tantas… Demasiadas, no creo que seas capaz de verlas todas, ni siquiera contarlas, amigos, no me estoy poniendo cursi y no me refiero a estrellas. Películas, romances juveniles, dramas románticos. Normalmente me molestan, pintando el amor como algo tan difícil pero no imposible, idealizando escenas de besos bajo la lluvia o postdatas preciosas. Pero oye, esta puede ser de esas que no te molesta ver, que lo hacen tan bien que te parece real y cotidiano que los amantes se estén muriendo y su mejor amigo sea ciego, no me molestó verla…

P - Igual que a ti, y supongo que a la mayoría del género masculino, las películas románticas no son mi fuerte. Me toca las pelotas que metan a una tía buena y a un guaperas delante de la cámara para que follen, dejen de follar por cualquier gilipollez, y al final terminen volviendo a follar. Y me jode que ganen millones por ello. Aún así, cuando un romance es bueno de verdad, yo soy el primero en levantarme y aplaudir y  el primero en ponerme sentimental si hace falta. Dame razones para que me guste lo que estoy viendo y estaré dispuesto a olvidarme de mi virilidad y estaré dispuesto a olvidarme que habla de amor.

A - “Y de repente, ¡Pum!, me encendí como un árbol de navidad”. Dejando de lado lo que es el romance, no podemos dejar pasar una historia tan dura como la de dos adolescentes con los días contados, dos adolescentes que lo único claro que tienen es su amor y su enfermedad. Esta película nos deja momentos muy duros, realmente jodidos, ir a tu propio funeral, joder, los tiene cuadrados. Lo que no entiendo es la manía de llamarse por el nombre completo, no lo entiendo mucho.


P - Vale, supongo que ya me obligas a hablar de la película en si. No es una mala película. Hasta se podría decir que es una buena película. Aunque hay un “pero”, un “pero” muy grande. No tiene mérito. No tiene mérito hacer llorar a niñas de 15 años mediante un romance adolescente con cáncer de por medio. Usar el cáncer para intensificar la historia de amor es muy rastrero. Eso es lo que menos me gusta de la película, su ansias por parecer natural y realista, a pesar de ser tan poco realista. Su afán de ser tan bonita y tan indie con esa narración de “en otras películas pasaría tal, pero aquí somos realistas y por eso somos mejores”. Eso es muy perro.

A - No creo que te falte razón, me siento raro haciendo una crítica a una película romántica y que coincidamos. En fin, algo que no me puedes discutir es esa pedazo de “chica”, te diré dos cosas que ha dejado Hazel Grace tras su vida: una interpretación buena y la moda de llevar el pelo corto. Estoy enamorado de Hazel Grace, normalmente no me sincero tanto, pero es que esta chica ha generado mi prototipo de mujer perfecta.

P - Supongo que a mí no me ha cautivado tanto. Esa pareja no dejan de ser niños con cuerpos de adolescentes y la cultura de una persona de 30 años. Son dos personas que han pasado de ser niños a ser adultos, será por eso que no me convence tanto la persona en sí, ya que es una mezcla de las dos cosas. Y a parte, hay escenas que rebajan la película de una forma increíble. Avisadme cuando veáis a dos jóvenes besándose en un museo del holocausto y toda la gente se ponga a aplaudir. Como película romántica es muy superior a la media, pero al ver eso te dan ganas de dejar de verla.

A- No me pondré más en ridículo expresando mi admiración a un personaje ficticio, pero debería. En fin, no se como lo verás tú, pero es sorprendente la de buenas críticas que ha recibido este topicazo, entre ellas esta (almenos por mi parte). No puedo decir nada malo de…, bueno la extraña “metáfora” del protagonista por ponerse nicotina apagada en los labios, “¿Tu porque fumas? Pa’ hacerme el chulo…”

P - No hay que malinterpretar mis palabras, no creo que sea una mala peli, ni digo que no me gustara, sin embargo sí que sobrevalorada está, me jode que digan que es tan bonita y tan romántica cuando no llega a la mitad de la belleza o de las emociones de películas como “¡Olvídate de mí!”, la trilogía de “Antes del anochecer”, “Once” o “Lost in translation”. Claro que supongo que no se puede pedir a todas las películas que sean tan diferentes y jodidamente buenas. Para terminar, quiero destacar el papelazo de Willem Dafoe, ese personaje que marca la diferencia en la película y que eleva su nivel, más por la actuación que por el personaje, ya que si bien en su primera escena el personaje deslumbra, cuando se “completa” en el tramo final pierde bastante. Me gustaría comentar más cosas pero tampoco es plan. Así que diré que es la mejor película que ha estado de moda entre las niñas de 15 años. Pero aunque sea mil veces mejor que "Tres metros sobre el cielo", no deja de ser una película de moda entre niñas de 15 años.